lunes, 29 de septiembre de 2014

UNAS VECES ERES PARABRISAS, OTRAS VECES ERES MOSQUITO...


Unas veces eres parabrisas, otras veces eres mosquito…

No tengo un ideal de hombre, aunque un Seal, un Florian David Fitz o un Pepe Reina no estarían nada mal para hacerme sentar la cabeza, pero soy más de andar por casa. Aunque sí coincide en que últimamente éste perfil se repite:

ü  más o menos alto
ü  melómano perdido (como yo)
ü  con la corazón tirando al lado izquierdo
ü  con una alta dosis de sentido del humor y poco del ridículo
ü  con o sin un pelo de tonto…
ü  y que tanto le guste hacer deporte como liarse de cañas hasta el amanecer…

Un día de repente, de la manera más tonta y en la que menos confianza tenía, como que Paquirrín volviese a las aulas…Aparece alguien en quien poco a poco descubres tus mismos gustos musicales, tus mismos hobbies, tu misma afinidad política (esto es algo muy superficial últimamente entre los habitantes de este país, pero a mí no me deja para nada indiferente, JAMÁS podría compartir mis días con alguien de ideas conservadoras, por no decir un facha) y lo peor de todo, que tenga tus mismas taras… ESTO ENGANCHA!

Poco a poco te vas dejando llevar por esa sensación de cercanía que despierta el conocer a alguien con quien compartes todo ese tipo de ruinas, y digo ruinas, porque sabes que todo ese tren de complicidad en algún momento te acabará arrollando, de un modo u otro. Un día te das cuenta que tus mensajes dejan de tener importancia, que tu tiempo no parece valioso, y entonces… abres los ojos y ya no hay vuelta atrás, TE LO ACABAS DE TRAGAR!



Todos hemos dado calabazas, aunque a veces se pasa mal, nunca es tanto como cuando te toca ser el mosquito kamikaze y pegarte el ostión contra el parabrisas.

Mientras se está solo, no se sufre por nada, el día a día es fácil, no esperas nada, ni a nadie, te la pela el whatsapp, todo funciona como un perfecto engranaje recién engrasadito y dispuesto a producir al 100%.

Sin saberlo (o siendo totalmente conscientes) siempre contamos con alguien a quien haríamos completamente feliz con dedicarle un simple aleteo de pestañas, que está incondicionalmente cerca de ti siendo más que un amigo, aguantando tus impertinencias y que aun así ahí sigue, solo por compartir tiempo contigo, sin embargo, lo que te llama la atención es el granuja que no pierde un minuto en ti, que te dedica un plan B, que te mantiene como dice mi hermano como en la pecera de una marisquería, ahí para cuando quiera comer algo saladito tirar la caña y en unos minutos: DESPATARRADO Y LISTO PARA SER RELAMIDO!

Incluso hay personas con las que en un momento dado de tu vida quieres más cercanía y otras en las que lo espantas y viceversa…

Así es, en esta vida la tortilla va cambiando según el Karma o a lo que sea le sale de las pelotas. Imagino que solamente para compensar alguna mierda de la que no soy consciente y sobre la que paso de investigar, que ya bastante difícil es subsistir para mí día a día y no acabar más tocada que Massiel en la boda de la Jurado. Y es que a veces no hay más ciego que el que no quiere ver y es uno mismo el que no ve los letreros luminosos, que el resto de tus más cercanos, que desde una buena perspectiva y alejados de la tontería cegadora te dicen desde un principio “POR AHÍ NO! QUE TE LA VAS A DAR!” y tú venga, duro contra la pared. Te convences a ti mismo que el resto no ven los detalles que tú si crees ver y qué va! Eres un puto cegarruto cabezón sin más ambición que agarrarte a algo que te pareció un sorprendente soplo de aire fresco en tu vida… Y UNA CACA COMO EL SOMBRERO DE UN PICAOR!!!

Pues bien, nunca he sido yo de marcadores, pero en los últimos meses voy desempatada, llevo 3 veces en versión parabrisas y otras 2 en versión mosquito, el caso es que ya se me ha acabado la paciencia y paso de buscar empates, quien me quiera que me busque que tengo mucho bueno que ofrecer y muy poquito tiempo que perder…

Eso sí, me quedo con medio concierto de mis Extremoduro, ya que la otra mitad ni la recuerdo, ni el primer beso, ni el resto de la noche…pero sí el despertar...

Ah! Por cierto, la frase no es mía, es del final de esta canción de AMPARANOIA…
MISS DIONY (sin sala de espera)


2 comentarios:

  1. No sabes como te entiendo!!! No habras tenido algun parabrisas de 1,90 recientemente, no?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues me dejas con la duda, más que nada porque no sé quien eres...

      Eliminar