Ya hacía mucho tiempo que no escribía, iba siendo horita de hacerlo y para
variar voy a diseccionar otra parte de mí...
Tengo por costumbre ser sincera y fiel a mis pensamientos y sobre todo
coherente. Por lo que si hay algo que me molesta, que me irrite o que no me
gusta simplemente lo digo, lo manifiesto, lo hago saber, entiendo que mis
maneras no han sido siempre las mejores, pero con el paso de los años:
- JURO...La justicia es una
mierda y no existe, sobre todo en este país
- PROMETO... NO SOY CREYENTE
- ASEGURO... esto es lo que más
se aproxima
Lo he intentado y poco a poco espero conseguir ser algo más
"políticamente correcta" en vez de vomitar oral o por escrito lo que
me viene a la cabeza.
Recientemente se me han juntado unas cuantas situaciones en las que me he
tenido que controlar sobremanera porque me veía incrustando la cara de mi jefe
contra un cristal, retorciéndole el pescuezo a un niñato contestón con sonrisa
estúpida y abofeteando a una cotilla de pacotilla. Ganas no faltaron, pero como
ya digo, intento cada día ser un poco más correcta, y eso anterior está feo...
Y es que según "mi impresión", o mi modo de ver, tengo un jefe
que es un capullo integral, que se cree que por ser jefe está por encima del
bien y del mal y que por el hecho de serlo es más inteligente que cualquiera de
los que le rodeamos, tanto es así que cuando te acercas a su mesa, se estira,
levanta los brazos, los dobla y se coloca las manos detrás de la nuca, lo que
en lenguaje no verbal viene a ser que "te crees por encima de tu
interlocutor", no os engañéis, no es comodidad...
A cuadros se quedó el día que se lo dije,
- ¿Te crees más o mejor que yo?
Su cara era un poema... Se lo expliqué y desde entonces dejó de hacerlo,
una semana o dos, no tiene retentiva... El HIJOPUTISMO y la racanería invaden
el resto de su ser y no da para más...
Este fin de semana pasado sin ir más lejos, me dio la "impresión"
y una vecina me lo confirmó que pilló in fraganti a unos chavales fumando
porros en mi plaza de garaje, pegaditos a mi coche, en un poyete que hay en mi
plaza de aparcamiento. Por mi, todo individuo es libre de fumarse un porro, de
comerse un bocadillo de uñas o hacerse un potaje con las pelotillas del
ombligo... ¡ME LA SUDA!
El problema viene cuando lo hacen en mi propiedad, donde nadie les ha
invitado a entrar, temiendo que un día se les cruce un cable y la emprendan a
patadas con el coche o me aparezca rayado y aun no lo he terminado de pagar...
Cuando bajé todavía olía a gloria bendita. Había colillas y chivatos
alrededor de mi coche. Al salir a sacar al perro me encontré de bruces con
ellos, aún rezumaba el tufillo a "maruja" en sus abrigos, los ojos
inyectados en sangre como en Blade y sus sonrisas tontas les delataron...
Les dije que tenía la "impresión de que habían estado fumando en mi
plaza de garaje y que hicieran el favor de ir a otra parte, al enorme parque
que rodea nuestra urbanización, por ejemplo. También les dije que me daba la
"impresión" de que ya tenían pelitos en los huevos para buscarse la
vida en vez de dar por saco al resto del vecindario...
Como todo les hacía gracia y yo no estaba para aguantarle el pedo a nadie y
menos a estos adolescentes fumados insoportables llamé al conserje para que
fuese él quien les pusiese los puntos sobre las "ies", pero me dio la
"impresión"de que aquel hombre algo carente de espíritu simplemente
suscribía lo que yo le iba diciendo y que no iba a hacer absolutamente nada más
de lo que yo ya había hecho . Como me preocupaba el porvenir de mi auto, llamé
a la policía.
- La local: No actúa en
propiedades privadas, tales como una urbanización... ¡cágate! O hay sangre
o te dan por el culo!
- La Nacional: Tardaron 5 minutos
en aparecer en la puerta de la urbanización
Se personaron un par de agentes jóvenes y amables, con "ganas de
trabajar", según "mi impresión" con unas cejas perfectamente
depiladas como señoritas setenteras, a los que acompañé a mi plaza aparcamiento
y donde ellos mismos pudieron comprobar cómo aún olía a salón de té de
Marruecos.
Los vi marcharse encaminando sus pasos al edificio donde vive la familia
del chaval de la sonrisa perenne para darle un tirón de orejas e intentar
disuadirle de que repita los hechos... Veremos cómo acaba el cuento...
También tengo la "impresión" de compartir mesa de escritorio en
el trabajo con un ser que cuanto menos me resulta peculiar ya que me da la
"impresión" de que es una maleducada de tres pares de cojones, puesto
que entre otras cosas se dedica a bostezar y toser sin taparse la boca...
¡¡¡¡¡¡7!!!!!!! ¡¡¡¡Se los he contado!!!!!!
¡¡¡¡¡¡¡ tiene 7 empastes!!!!!
Además de pintarse y peinarse delante de todo el personal, entre otras
lindezas...
A juzgar por el interés que demuestra por cada persona con la que hablo y
en las que siempre intenta meter baza con la atención que pone en cada una de
mis conversaciones telefónicas, y porque tengo sus putos ojos clavados en mi
cara durante muchas horas al día, me da la "impresión" de que es una
puta cotilla de vecindario, de esas que no se preocupan de lo que acontece en
su casa y que están enganchadas a las vidas ajenas como si les fuera la suya
propia en saber más allá de lo que tú les quieres contar y que dan la
"impresión" de salir a la calle cada día con el solo objetivo de
conseguir algo más de información.
Ayer mismo, mientras mantenía mi primera clase telefónica de inglés de este
curso, ella se asomaba, clavaba sus ojos y hacía muecas mientras yo
intentaba leer un artículo de cómo se embotellaba un tipo de vino en la antigua
Roma, y del que al terminar debía ir resumiéndole al profesor... En inglés,
claro está.
Ella se marchó antes de que terminara la clase, y yo tuve que salir un
momento a aparcar mi coche. Mientras, meditaba el modo de hacerle saber que me
tiene hasta la polla del acoso y la falta de privacidad a la que me somete,
pero claro, siendo todo lo políticamente correcta que debo.
Y como el hecho le debió de llamar poderosamente la atenció a su vuelta me
preguntó:
- Eso que hablabas era del curso
de inglés que hay?
No hija, ¡qué va! que me quedé con la marihuana de mi vecino y me ha dado
por hablar inglés así, sola por teléfono, me llamo a mí misma...
¡No te jode!
Y le dije, conteniendo al Miura que llevo dentro:
- Antes de que sigas, te
agradecería que considerases el concederme un poco de privacidad y espacio
a pesar del entorno abierto en el que trabajamos porque "me da la
impresión" de que te interesa mucho todo lo que acontece en mi sitio,
mis conversaciones telefónicas, personales o profesionales que tengo con
la gente que se acerca a mi sitio...
Y antes de que pudiera seguir, me contesta:
- Pues serán eso, "impresiones
de esas tuyas"
Ni la pared de la presa del Atazar después del deshielo se hace una idea de
lo que tuve que contenerme... Es como un chuchillo de esos, un perro patada con
abrigo guateado, de las que llevan un bolso de "CH" que en la
etiqueta pone "Calorina Horrores", del mercadillo, como la ropa, que
ojo, no hay nada de malo en esto, pero mejor no te las des de nada... Hoy lleva
un atuendo espectacular, todo le queda grande y como es bajita, me recuerda a
ET vestido de mujer... solo le falta el sombrerito...
¡¡¡¡¡UN CUADRO!!!!
Yo en cambio, creo que tengo la suerte de tener una imaginación
privilegiada que me hace crearme historias alrededor de lo qe me gusta,
fantaseo con cómo me gustaría hacer algo o cambiar mi vida de una manera tal
que me permita vivir lo más feliz posible sin estrés ni agobios, sin atascos,
sin hipócritas, sin cretinos, sin gente falsa y como no...
¡¡¡¡¡SIN COTILLAS!!!!
Miss Diony
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